martes, 28 de enero de 2020

¿ Cómo crece el amor ?


Realmente, existe alguna forma de desarrollar el amor ? O sólo se genera de forma espontánea ?
Preguntas que siguen siendo discutibles, tal vez tengan otro punto de vista.
Siempre se ha dicho que el amor es un sentimiento que surge, que es espontáneo, incrontrolable, que nos arrebata. Pero, en estos tiempos de mayores experiencias en diferentes áreas humanas, la conclusión a la que se arriba es que hay algo adentro nuestro que nos conecta con algunos y no con otros. Ese algo recibe varios nombres: flechazo, karma, lazos del árbol genealógico, sincronicidad, encuentro de almas. Así que en este punto, ya hay otras formas de repensarse.
Y en cuánto al desarrollo del amor, tal vez no hay que desmerecer la idea de que el amor, al ser una construcción entre personas, se apoya en acciones concretas que lo desarrollan. Comprensión, escuchar activamente al otro, tener empatía con lo que se ofrece, estar dispuesto a reencuadrar propias acciones si es que éstas molestan al otro, definir cuáles son los límites, atreverse a abrir el corazón genuinamente, reconocer errores cometidos intensionados o no, estar dispuesto a brindarnos y brindar perdón. Estas acciones y varias más hacen del amor una construcción que genera y se basamenta en la Confianza, base fundante de toda experiencia humana. La confianza siempre nos bendice con el amor, las ganas de vivir, el disfrute, la construcción y la expansión. Si poseemos carencia de confianza en uno mismo, o en el otro, o en el afuera, la vida se vuelve aislada, alienada, empobrecida, contraída.

Oscar Gananopulo.

Consultor Psicológico.

miércoles, 8 de enero de 2020

¿ Dónde elijo focalizar mi mente ?

Muchas veces leemos frases como "Lucha contra.." todo tipo de situaciones indeseables: cáncer, discriminación, guerra, maltrato animal, etc..
Lo cierto es que la mente no distingue la negación, porque antes de toda acción necesita saber el hecho. Si digo "Lucha contra la guerra" o "No a la guerra" (para la mente es lo mismo) la mente necesita focalizar en "la guerra" para accionar, y es ahí donde quedé atrapado en lo indeseable. Le doy cuerpo, consistencia, mi atención.  Así que muy diferente es "No quiero subir de peso" que "Deseo bajar mi peso". En la ultima cita, la mente hace foco en "mi peso", pero la acción es positivizante: Deseo reducirlo.  Este simple manejo de estructura lingüística me posibilita potenciar en mi vida todo aquello que deseo. 
Ya sabés: Si deseás paz en tí, mejor decir "Estoy en paz" , y saca de tu lenguaje el  "No a la guerra".
Frases como "Que la paz descienda sobre la humanidad", "Merezco una actividad mas rentable económicamente que la que poseo", "Cuido mi salud apropiadamente", "Mis relaciones son más íntimas diariamente" nos proporcionan focalizar mi mente en lo que deseo llevando toda mi energía para su cumplimiento. 
Como una buena analogía, el negro se aclara colocando blanco, imposible "sacando" el negro.
Tomemos consciencia que esta focalización positiva de la energía de mi mente también redunda en una mejora en el estado de ánimo, tranquilidad interior y buena disposición ante la vida.

Oscar Gananopulo.

Consultor Psicológico.