jueves, 21 de junio de 2018

Morir para ser yo!


Anita Moorjani - Morir para ser yo!

Luego de una experiencia de muerte clínica, esta mujer nos habla sobre lo que aprendió cuando volvió. Ella nos dice:


1- Es vital enfocar nuestra conciencia en el amor. Y no sólo en amar a los demás, sino en el amor a Sí Mismo. Cuando nos amamos a nosotros mismos, nos valoramos, y podemos así enseñarles a los demás como tratarnos. Esto permite no necesitar controlar ni intimidar a nadie, ni permitirlo que los demás lo hagan con uno. Quererse a sí mismo es tan importante como querer a los demás, y cuanto más me quiero en la misma intensidad quiero a los otros.
2- Vivir la vida sin miedos. Se nos enseña a temer para así estar “a salvo” . Lo único que nos mantiene a salvo es el amor, por eso es importante el punto número 1. Quererse a uno mismo es también querer a los demás, y así todos nos cuidamos.
3- Mantener el humor, la risa y la alegría en el vivir.
4- La vida es un regalo. Jamás es una tarea rutinaria. Y los desafíos son un regalo de la vida. Aprendizaje.
5- Es necesario siempre Ser uno mismo, y respetárselo. Abrazar la propia singularidad y brillar tanto como uno pueda hacerlo. Es importante llegar a saber quién Uno Es, amarse incondicionalmente y ser únicamente uno mismo.

martes, 12 de junio de 2018

Sentir - Pensar – Hacer



Diferentes estilos de vida proponen comenzar desde un punto diferente de este triángulo. Los voluntariosos desde el Hacer, los sentimentales desde el Sentir y los mas racionales desde el Pensar. Ahora, ¿ Cuál es el más adecuado ? En principio, cada punto es más adecuado para la personalidad de cada uno, si eso significa reconocer que inteligencia es la más activa en nosotros. Desde distintos paradigmas, la secuencia Sentir-Pensar-Hacer cobra relevancia ya que cuando nuestra pasión interna nos guía informándonos que deseamos, y a esa dirección la organizamos desde nuestra inteligencia para darle una forma válida en el mundo, el hacer se torna una suma de acciones asertivas y estratégicas de fácil configuración. Dicho así, el circuito placentero estaría completo, acabado y listo para un nuevo circuito. Hubo una acción coherente. El Counseling Gestalt diría que la Gestalt se ha cerrado, y eso redunda en sanidad interior.

martes, 5 de junio de 2018

Emociones básicas


Existen ciertas expresiones faciales comunes en los seres humanos, innatas al mundo emocional de la especie. Esta fue la conclusión a la cual arribó el psicólogo Paul Ekman sobre la investigación en emociones humanas que desarrolló en 1972. Estas 6 emociones básicas arman el acróstico llamado MATIAS como forma de recordarlas. Es útil tener en cuenta que nuestro cuerpo reacciona exactamente igual si lo que nos sucede es real o lo imaginamos.

Miedo: Cuando aparece, nuestro cuerpo reacciona con tensión, stress y bombeando sangre mas rápidamente a los músculos. Su utilidad es defendernos, permitiéndonos atacar o salir huyendo.

Alegría: Cuando aparece, nuestro cuerpo se afloja, hay sonrisas y bienestar. Las endorfinas nos invaden. Su utilidad es ponernos contentos, generando ganas de hacer actividades y de disfrutar de la vida.

Tristeza: Cuando aparece, nuestro cuerpo se aplana y nos sentimos desmotivados, con pensamientos pesimistas. Su utilidad es meternos hacia nuestro interior, alejarnos de las actividades y permitir así inspirar cambios, o actos creativos.

Ira: Cuando aparece, nuestro cuerpo reacciona con aceleración, pulso aumentado, calor. Un gran torrente de energía extra nos invade y nos moviliza a reaccionar. Su utilidad es impulsarnos a alcanzar eso que queremos, y que no nos está sucediendo.

Asco: Cuando aparece, rechazamos completamente eso que nos lo produjo. Su utilidad es protegernos de algo que nuestro cuerpo considera dañino.

Sorpresa: Cuando aparece, nos quedamos estupefactos ante eso que no esperábamos que suceda. Su utilidad es paralizarnos y ser la precursora de otras emociones que sí tienen valencia.

Ninguna emoción es buena o mala, eso solo es una interpretación de nuestra mente. Cada emoción nos ayuda si la manifestamos en el momento adecuado.